Trigueros

miércoles, 20 de enero de 2016

El Dolmen de Soto

PROPIEDAD: Pública, dependiente de la Delegación Provincial de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, que lo adquirió en 1987.
UBICACIÓN: Sobre el Cabezo del Zancarrón, en la finca la Lobita, dentro del término municipal de Trigueros.
ACCESOS: Desde la carretera A-285, Huelva-Sevilla, desviándose hacia el norte a la mitad del km. 619, situado entre Niebla y San Juan del Puerto. Desde la carretera nacional 436 (San Juan del Puerto- Badajoz), vía Trigueros y camino agrícola asfaltado hasta el dolmen.
CRONOLOGÍA: Entre el 3.000 y el 2.500 a.C., dentro del ámbito cronológico de la Edad del Cobre o Calcolítico.
TIPOLOGÍA: Arquitectura megalítica.
FECHA DE PUBLICACIÓN: Declarado Monumento Nacional y publicado en el BOE. con fecha de 04/06/31. Está inscrito como monumento en el Catálogo General del Patrimonio Histórico de Andalucía.


El Dolmen de Soto forma parte del conjunto de más de doscientos monumentos megalíticos de la provincia de Huelva, que se desarrollaron en le occidente europeo entre el neolítico y la edad del Bronce. Fue descubierto por Don Armando de Soto en 1922, iniciándose en ese mismo año las excavaciones, las cuales finalizaron tras el estudio de Hugo Obermaier, publicado en marzo de 1924 en el Boletín de la Sociedad Española de Excursiones. Años más tarde, el 3 de junio de 1931, el dolmen fue declarado Monumento Nacional.
Los monumentos megalíticos son construcciones funerarias para enterramientos generalmente colectivos de inhumación, entre los que uno de los más comunes es el dolmen (construcción en forma de enorme mesa en la que una losa horizontal está sostenida por dos verticales (ortostatos).

El de Soto es un dolmen perteneciente a la familia de los dólmenes de corredor largo(conjunto de dólmenes yuxtapuestos), siendo el más grande de los encontrados en nuestra provincia y uno de los mayores de la península. Está formado por una cámara y un corredor en V que se ensancha hacia el interior. Su longitud es de casi 21 m., variando su anchura desde los 0,82 m. en la puerta hasta los 3,10m. en la cámara. Está orientado de Levante a Poniente, de tal manera que los primeros rayos de sol en el equinocio, avanzan por el corredor y se proyectan en la cámara durante unos minutos, en un rito donde quizás los difuntos renacían de la vida de ultratumba, bañados por la luz solar.
La galería del dolmen está formada por grandes ortostatos de granito en su mayoría, junto con otros de arenisca y pizarra, traídos probablemente de una zona cercana a Tejada (Paterna del Campo), desde unos 40 kilómetros de distancia. Los ortostatos presentan numerosos grabados y algún resto de pintura, correspondiéndose con los restos humanos y de útiles allí encontrados. Éstos, por el contrario, son escasos y el hecho de que en otro dolmen cercano los hallazgos fueran cuantiosos, hace pensar que el monumento funerario fue poco utilizado, quedando pronto en desuso y relleno de tierra.
Pese a sus grandes dimensiones solamente recibieron sepultura en él ocho cadáveres y en siete sitios diferentes. Todos ellos aparecieron sentados, en cuclillas, arrimados a la pared, en cuyo ortostato se realizó algún grabado representando la efigie del difunto, su signo protector totémico o alguna de sus armas. Junto a los cadáveres apareció un ajuar funerario compuesto de útiles líticos como hachas, cuchillos, etc.; material cerámico (a veces con decoración incisa) como vasos, cuencos, platos, etc.; un brazalete cónico de hueso; algunos fósiles marinos; etc. En la excavación también se halló una mesa, ahora inexistente, en el centro de la cámara, justo delante de la cabecera, muy baja y rectangular. Sobre ella no se encontró nada y es de suponer que tendría una función ritual.


La conformación de la entrada y de la cámara es lo que más variaciones han sufrido, encontrándose en 1923 los ortostatos del acceso desperdigados y faltando 2 ó 3 grandes losas que techaban la cámara. La primera restauración por parte del Ministerio de Cultura se llevó a cabo en 1957. En 1981 se acometió la primera fase del proyecto de restauración del dolmen por Don Ismael Guarner. La segunda fase se efectuó en 1982, también por el arquitecto Guarner, presentando la Memoria final de las obras realizadas en 1985. En 1986 se inició el proyecto de protección arqueológica del monumento por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, a través de la Delegación Provincial de Huelva, mejorándose el cerramiento, interior, entorno y acceso del dolmen, gracias a su conexión con la A-286, nacional 436 y una serie de caminos asfaltados.
En 2008 se concluyó la primera fase de la puesta en valor de este monumento, tras unas investigaciones que lo situaron, por su anillo perimetral de más de 80 metros, como una de las mayores construcciones megalíticas de Europa Occidental. En este estudio se pudo fijar mediante dataciones de carbono 14, la fecha de su construcción hacia finales del tercer milenio. 
Cercanos a este monumento, menos de 20 Km, se encuentran los interesantisimos conjuntos históricos artísticos de Moguer y Niebla, además de la hermosa iglesia gótico-Mudejar de San Anton en la localidad de Trigueros. En relación con los monumentos megalíticos de nuestra provincia se recomienda la visita al dolmen del Labradillo (Beas), al conjunto dolménico de los Gabrieles (6 monumentos), el dolmen del monje, el tholos de valdegrosa, los dólmenes de la mesa de la hueca. (Valverde del Camino) y el conjunto megalítico de la aldea de El Pozuelo (Zalamea la Real).

Fuente: Junta de Andalucia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.